Page 54 - Reflexiones sobre San Jose

4.4. LA SÍNTESIS ORIGINAL DE JOSÉ: UNA VIDA posible en quien posee la perfección de la caridad” (n. 27).
UNIFICADA
La perfección de la caridad permite a José, y a quien
Coordinar la vida interior de la persona con su necesaria sigue sus huellas, armonizar y conjugar las aparentes
actividad externa constituye uno de los mayores problemas contradicciones entre el estar encerrado en la historia
y desafíos de nuestro tiempo. “Sin embargo permiten olvidando la interioridad, o la evasión de la historia para
descubrir en sus «acciones» —ocultas por el silencio— un caer en el intimismo.
clima de profunda contemplación. José estaba en contacto
cotidiano con el misterio «escondido desde siglos, Sin 5. ITE AD JOSEPH
embargo, José de Nazaret se presenta como hombre
capaz de armonizar lo cotidiano de la vida de trabajador La figura de san José modelo de vida interior, delineada
con la conciencia de vivir a la presencia del Hijo de Dios. por la Exhortación Apostólica Redemptoris Custos, es un
Su trabajo diario está unido a la contemplación del misterio llamado a lo esencial y otorga la primacía a valores, que en
«oculto desde los siglos», que «puso su morada» bajo los últimos tiempos han sido ensombrecidos y olvidados.
el techo de su casa.” (n. 25). En José la vida interior no Por lo tanto, vale la pena dejarnos inspirar por Él y
está nunca separada de la actividad exterior, sino por el encomendarnos a la “a la protección de aquel a quien Dios
contrario orienta y valoriza la dimensión histórica, cotidiana mismo «confió el cuidado de sus tesoros más preciosos
y concreta. y más grandes” (S. Rituum Congreg., «Quemadmodum
Deus). Esta es la lección que el Custodio del Redentor nos
La insondable vida interior de José, como la define la deja a nosotros llamados a testimoniar a Cristo y mantener
Exhortación Apostólica, es fuente de motivación, de el diálogo constante con Dios sin descuidar el compromiso
dedición y de celo en el servicio. El texto menciona algunas en el mundo.
manifestaciones exteriores que derivan de la vida interior:
“las grandes decisiones” (n. 25); “Esta sumisión a Dios, Nuestro santo Fundador recomienda: “A S. José pedimos
que es disponibilidad de ánimo para dedicarse a las cosas que nos haga de director espiritual”. Y añade: “S. José,
que se refieren a su servicio” (n. 26); “de donde surge para protector de la vida interior, sé mi Maestro”.
él la lógica y la fuerza —propia de las almas sencillas y
limpias” (ib.), la de disponibilidad absoluta para servir
fielmente a la voluntad salvífica de Dios y la capacidad
de renuncia “por un amor virginal incomparable, al natural
amor conyugal que la constituye y alimenta (n. 26).

Además, la síntesis entre lo interior y lo exterior se
manifiesta más en otras expresiones de la Exhortación
Apostólica: “El trabajo de carpintero en la casa de Nazaret
está envuelto por el mismo clima de silencio” (n. 25) y, aún
más, se puede “descubrir en sus «acciones» —ocultas
por el silencio— un clima de profunda contemplación”
y finalmente, vivir “en contacto cotidiano con el misterio
«escondido desde siglos», que «puso su morada» bajo el
techo de su casa”.

Igualmente, precioso es el texto de la Exhortación
Apostólica donde se señala la fuente superación de
las aparentes contradicciones entre interior y exterior:
“Además, la aparente tensión entre la vida activa y la
contemplativa encuentra en él una superación ideal, cosa

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