Page 55 - Reflexiones sobre San Jose

El trabajo tiene un lugar

especial en el Evangelio.
Jesús ha trabajado
en el taller de su Padre

Del libro:
SAN GIUSEPPE E
LA REDENZIONE
DEL LAVORO

Padre Tarcisio Stramare OSJ.

«Jesús no se avergonzó trabajar en el taller mucho más allá de cualquier de una actividad ejercida
de su padre y quiso consagrar el trabajo ocasionalmente al lado de otro. Se trata de una sumisión
humano con su sudor divino». cuyo significado califica y define toda la vida de Jesús.
(Pio XII, encíclica Fulgens radiatur, 21 marzo 1947).
Cuando Lucas, después del acontecimiento de la
o llegaremos a meditar lo suficiente sobre el misterio
Nde la encarnación, pero si tener un panorama sobre permanencia de Jesús en el templo, afirma que “el regresó
con sus padres a Nazaret y vivía sujeto a ellos. (Lc 2,51),
este gran misterio. “En el crecimiento humano de Jesús «en con esta expresión no significa simplemente concluir una
sabiduría, edad y gracia» representó una parte notable la virtud
de la laboriosidad, al ser «el trabajo un bien del hombre» que fase de la vida de Jesús en la tierra, preparatoria a la del
«transforma la naturaleza» y que hace al hombre «en cierto ministerio público.
sentido más hombre”. (Redemptoris custos, n. 23).
Una exégesis, “utilizando la computadora”, que hoy
Dada la importancia del trabajo en la vida y transformación siempre más a la moda, buscando cuantas veces se
del hombre, es comprensible por que “El trabajo humano encuentra en el texto sagrado una palabra para después
y, en particular, el trabajo manual tiene en el Evangelio un deducir su importancia, puede subestimar, dependiendo
significado especial. Junto con la humanidad del Hijo de Dios, de la frecuencia, el participio hypotassómenos,
el trabajo ha formado parte del misterio de la encarnación, y (ύποτασσόμενος),
también ha sido redimido de modo particular. Gracias a su utilizado por Lucas para definir la vida oculta de Jesús.
banco de trabajo sobre el que ejercía su profesión con Jesús,
José acercó el trabajo humano al misterio de la redención”. El Catecismo de la Iglesia Católica interpreta el testo de
(Redemptoris custos, n. 22). modo magistral: “Con la sumisión a su madre, y a su padre

legal, Jesús cumple con perfección el cuarto mandamiento. Es
De hecho, al lado de José, Jesús ha no sólo aprendió el la imagen temporal de su obediencia filial a su Padre celestial.
oficio de su padre; Él también ha compartido y asimilado La sumisión cotidiana de Jesús a José y a María anunciaba
la dimensión humana y concreta que caracteriza el mundo y anticipaba la sumisión del Jueves Santo: “No se haga mi
del trabajo, es decir “el estado civil, la condición social, la voluntad. (Lc 22, 42) La obediencia de Cristo en lo cotidiano de
experiencia profesional, el ambiente familiar, la educación la vida oculta inauguraba ya la obra de restauración de lo que
humana”. (Pablo VI, homilía del 19 marzo 1964). la desobediencia de Adán había destruido (cf.Rm 5, 19). (CEC.
La participación en el trabajo de José fue, por lo tanto, n. 532).

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