Page 76 - Reflexiones sobre San Jose
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hacia los bienes del mundo ni una condición soportada, como “el carpintero” (Mc 6,3) y como “Hijo del carpintero”
que deshumaniza y por lo tanto debe ser combatida; sino (Mt 13,55) en el Evangelio de Mateo, que da especial
que es una forma de vida continua y conscientemente importancia a José en el nacimiento y la infancia de Jesús.
aceptada. Cuesta; pero, a la luz del Evangelio, abierto Como hijo, Jesús ha recibido, aprendido y vivido en la
a nuevas dimensiones, haciéndonos interiormente más escuela y, al lado de José, el trabajo manual durante
libres. Varias son las manifestaciones y las demostraciones la mayor parte de los años de su vida en la tierra. Con
de pobreza, especialmente para nosotros los religiosos. San José la pobreza y el trabajo se convierten parte e
instrumento del misterio de la redención y de la revelación
Reportamos algunas: sobriedad (personal, comunitaria cristiana (cfr. “Redemptoris Custos, especialmente a los
e institucional); la fraternidad, a través de la solidaridad números 22-24).
y el compartir, la mansedumbre, hecha con humildad,
paciencia, renuncia a tratos de supremacía, el servicio a 4. Para nosotros Oblatos de San José.
los demás, comenzando por los más cercanos. El trabajo
es una de estas manifestaciones y las demostraciones También para nosotros Oblatos el trabajo y la pobreza son
de la Pobreza. En este sentido, hay necesidad de situaciones fundamentales de la vida humana y religiosa; y
razonamientos o demostraciones. en el trabajo como una manifestación del Voto de Pobreza
tenemos a Nuestro Patrono como un Modelo Extraordinario
No está fuera de lugar recordar la severa amonestación de sea como figura, vida y misión, pero accesible en la
San Pablo: “el que no quiere trabajar que tampoco coma” práctica. Según nuestras Reglas (Constituciones y
(2 Tes 3.10). Sin embargo, lo más significativas son las Reglamento General). Mencionamos el artículo 29 de las
palabras de Jesús: “trabajad (este es el primer significado constituciones: “Cómo verdaderos pobres, los Oblatos de
del verbo griego) no por la comida que perece, sino por el san José siéntanse comprometidos a la ley común del trabajo,
alimento que perdura hasta la vida eterna” (Jn 6,27). procurándose así los medios por su subsistencia para sus obras
y para socorrer a las necesidades de los pobres”.
3. A la escuela de San José.
Dejamos la reflexión personal y comunitaria en las diversas
El Evangelio muestra claramente que Jesús nació, vivió consideraciones que se pueden presentar.
y murió pobre. Especialmente durante los largos años
pasados en Nazaret con “sus padres” (Lucas 2,41), Continuando con el mismo artículo 29 de las Constituciones
mientras que “Jesús crecía en sabiduría, edad y gracia sobre “la ley común” del trabajo me demostración de
delante de Dios y los hombres”, “vivía sometido a ellos” pobreza, terminamos con el pensamiento confiado y
(Lucas 2,51-52), viviendo en pobreza y del trabajo. consolador en la Divina Providencia: “(Los Oblatos) alejen
de sí toda preocupación excesiva y confíen en la Providencia
Ciertamente, la familia de Jesús, dirigida por Giuseppe, del Padre, como lo hizo San José que fue el Santo de la
era pobre, aunque desconocemos la situación de esta Providencia”.
pobreza. Nos lo hace entender claramente sin sombras
de dudas, el Evangelio de Lucas, que está impregnado de Por lo tanto, estamos comprometidos en la Pobreza,
una teología de los pobres y de la pobreza, especialmente pero siempre confiando en las palabras de Jesús: “ No
cuando en la presentación de Jesús en el Templo sus se inquieten entonces, diciendo: «¿Qué comeremos, ¿qué
padres ofrecen “en sacrificio un par de tórtolas y de beberemos, o con qué nos vestiremos?» Son los paganos
pichones, como lo exige la ley del Señor” (Lucas 2.24): los que van detrás de estas cosas. El Padre que está en
este era el sacrificio de los pobres (cfr. Lev. 12,8). el cielo sabe bien que ustedes las necesitan. Busquen
primero el Reino y su justicia, y todo lo demás se les dará
La pobreza de la familia de Nazaret es manifiesta y se por añadidura. No se inquieten por el día de mañana; el
sostiene con el trabajo manual de José y del propio Jesús mañana se inquietará por sí mismo. A cada día le basta su
a la escuela de José. De hecho, durante la vida pública aflicción.” (Mt -33 6,31).
Jesús, precisamente en su visita a Nazaret, es reconocido
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