Page 89 - Reflexiones sobre San Jose
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A la difusión de la devoción a San José, que proponen   Si permanecemos unidas a María podríamos experimentar
        como  modelo  y Patrono de la  Iglesia  y  de las  familias   lo que vivió Isabel, estar colmadas del Espíritu Santo para
        cristianas”. (Artículo3).                             exclamar  a gran voz: «¡Bendita tú entre las mujeres y
                                                              bendito el fruto de tu vientre!» María nos enseñará a actuar
        Este artículo resume la espiritualidad y el carisma de   como “madres”, a darnos sin la búsqueda de la nuestra
        la Congregación, retomando las notas principales  del   realización. Ella en la vida cotidiana nos acompañará y
        carisma y la espiritualidad de los Oblatos, revelando, por   nos repetirá que hagamos lo que Jesús nos diga.
        así decirlo, el rostro femenino de una única medalla.
                                                              Para María y José no ha sido fácil ser padres del hijo de
        Las Oblatas de San José tratan de cuidar los intereses de   Dios, aquello a implicado el despojo de sí mismos, para
        Jesús a imitación de María Santísima y San José . Para   centrarse en Jesús.
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        comprender esta misión encomendada a las Oblatas, es
        necesario  hacer  una  premisa importante.  María  y  José   Oblatas  significa  donadas , estamos llamadas a ofrecer
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        eran como individuos y como pareja, dirigidos a Jesús. Su   nuestras  vidas, nuestra  voluntad,  nuestros  sueños,  a
        relación con Jesús fue única y podríamos decir irrepetible.   nosotras mismas a Dios, a través de las manos de José y
        Ambos habían tenido un rol específico para con el Señor:   María. Estamos llamadas a no pensar más en aquello que
        eran los padres. María Santísima como Madre y San José   queremos, sino en aquello que es mejor según la voluntad
        como Padre fueron llamados a amar y a servir a Jesús en   de Dios, viviendo para él y en él, en la Iglesia.
        este rol. El amor de un padre y una madre es grande y
        gratuito. Nosotras como hijas, todas hemos experimentado   Así como María y José cuidaron de su Hijo único, dando la
        este amor, si no de ambos, al menos de uno de ellos. El   vida con amor, enseñándole a ser una persona madura, de
        amor  de nuestros  padres,  por cuanto  grande  que  haya   sólidos principios y valores, así nosotras estamos llamadas
        sido, no está libre de límites y errores. El amor de María   a cuidar los intereses de Jesús en la Iglesia ,  dando vida
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        y de José es diferente en relación al amor de un padre   espiritual a los demás, sin pretender ser su jefes, en el
        y una madre. MaríaSantísima a pesar de ser criatura es   espacio de la gratuidad, e indicando el camino correcto, el
        Inmaculada,  por eso su amor era purísimo,  San José   camino de la Vida. A imitación de María y José, las oblatas
        por la misión  especial  que le fue encomendada,  había   están llamadas a generar vida espiritual en la Iglesia, es
        recibido las gracias necesarias para poder responder a su   decir, a donar al Salvador. A través delVoto de Castidad
        vocación, por la cual incluso su capacidad de amar era   servimos a los demás sin pedir reciprocidad, a través del
        diferente a la de cualquier otro padre terrenal. A partir de   Voto de Obediencia elegimos obedecer a las superioras,
        estas premisas podemos empezar a ver cómo las Oblatas   ya no pensando en nosotras mismas sino en aquello que
        de San José cuidan los intereses de Jesús, a imitación de   Dios quiere y a través del Voto de Pobreza compartimos
        María y José.                                         los bienes materiales, mirando las cosas esenciales, no
                                                              buscando nuestros intereses. María y José han cuidado
        Si permanecemos unidas a San José, podremos aprender   a Jesús con gran amor y también nosotras las Oblatas
        a vivir una relación profunda con Jesús y María y a dar en   estamos llamadas a servir a los demás con amor.
        comunidad y en el apostolado lo que hemos vivido en el
        escondite, con el Esposo Amado. José nos acompañará
        y nos enseñará a ser fieles a nuestros votos, a fiarnos de
        la divina Providencia y a cuidar los intereses de Jesús,
        porque con José “estamos seguras de ir siempre bien”.

                                                              5 Cfr. MARELLO GIUSEPPE, Lett. 95 del 4 nov.1877; Lett. 96 del 7
        4 DALMASO SEVERINO, OSJ, Biografia del Beato Giuseppe   nov. 1877.
        Marello, Vol. II, p. 1136 “..el can Marelloentendía dar inicio a una   6 Art 57 de las Constituciones de las Oblatas de San José: “Imitando
        institución femenina, paralela en cierto modo a aquella de los Oblatos   a San José, las Oblatas promueven los intereses de Jesús en la
        con la misma espiritualidad”; cfr. art. 3 de las Constituciones de las   Iglesia con verdadero celo apostólico, dando ejemplo de dependen-
        Oblatas de San José; cfr. MARELLO GIUSEPPE, Lett. 76 25 ott.   cia y de unión con la Iglesia local, donde la obediencia las llama para
        1872; Cfr. Fil. 2, 19-24;                             ejercer su misión”.

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