Page 34 - Reflexiones sobre San Jose

San José, Esposo de María

-P. Matthew Spencer, OSJ

a reflexión de este mes está guiada por el título principal sacristía por un momento, le dio un vaso de agua y lo animó
Ldado por la Iglesia a San José, es decir, San José, a relajarse. Regresaron al altar e intentaron nuevamente
Esposo de María. He escogido enfocarme en tres aspectos continuar, pero en vano. Varias veces volvieron a la
simples de este papel tan importante de San José, y pido sacristía. Cada vez que el sacerdote esperaba que el
que estas modestas contribuciones puedan inspirarles a novio encontrara la fuerza para continuar; pero cada vez
una reflexión más profunda sobre la importancia de San el novio entró en pánico y no podía pronunciar la promesa.
José en la vida de cada uno de nosotros como Oblatos de
San José. Al final, casi abrumado por la situación del joven, mi ex
profesor, que presidió el rito del matrimonio por primera
No tengas miedo. Durante mis estudios de teología, uno vez, decidió que posponer el matrimonio o guiar al joven
de nuestros profesores compartió con nosotros la historia decisivamente para pronunciar la promesa y confiar en la
del primer matrimonio que presidió como sacerdote. Él ayuda de la gracia de Dios. Escogió esta última posibilidad
personalmente había preparado a los novios y sabía que y, con una palabra a la vez, guio firmemente al novio a
estaban listos para este compromiso para toda la vida. hacer la promesa.
Después de la homilía, cuando el sacerdote se acercó
a la pareja, notó que el novio sudaba profusamente y Veinticinco años después, esa misma pareja invitó a mi
que parecía desconcertado. A medida que avanzaba el antiguo profesor a celebrar su Misa de aniversario de
rito, el novio se agitaba cada vez más. Comenzó a llorar bodas. Estoy seguro de que tuvo mucho que decir en su
y gemir como en una especie de agonía, y el sacerdote homilía durante la misa de aniversario.
ansiosamente trató de avanzar más rápido durante el rito.
Afortunadamente, la mayoría de los matrimonios son
Cuando llegó el momento de que la pareja intercambiara menos dramáticos y menos estresantes que eso. Sin
su consentimiento y profesara sus votos, el novio casi se embargo, ¿quién puede culpar al novio por una reacción
derrumbó. Gritó y miró al sacerdote en pánico e insistió en tan profunda a la grandeza de su vocación? De hecho,
que no podía continuar. El joven estaba tan asustado, tan la vocación al matrimonio es un compromiso total, un
abrumado por la naturaleza de un compromiso de por vida, compartir con la Cruz de Cristo y una verdadera imagen
que había quedado paralizado por el miedo. Mi profesor, de la relación entre Cristo y su Iglesia. El matrimonio como
un joven sacerdote en ese momento, llevó al novio a la vocación debería hacer temblar a los cónyuges con la

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